¿Casualidad que en fotos ajenas salga feliz pero en las nuestras salga vacio?
Mas que el azar de las pesimas ironias de la vida, se llama autodefensa. O acaso el no acumular recuerdos mas que en nuestras cabezas nos tiene una cita asegurada con el sicologo pero nunca con la automutilacion retinal al observar momentos agridulces para mi sistema nervioso central. El dolor pocas veces se provoca por generacion espontanea. El dolor es producto de las malas movidas en el gran tablero de ajedrez que solo la masa llama vida, los demas la refieren con cualquier sinonimo que refleje su gran capacidad de generar frustraciones y placeres que resultan del ciclo vicioso del respirar y observar a los demas hacer lo mismo.
Para que inmortalizar momentos, si lo unico que se que lograrás, es perdurar el futuro dolor de mis malas acciones y torcer aquellos puñales que los traidores y mis propias traiciones tan gustosamente clavaron en lo que queda de mi espalda aplacada por el andar de este mundo. Cual hermitaño en su cueva, yo en mi mundo debo debatir 2 o 3 dias el mero hecho de tener contacto social por el miedo a no salir lastimado en una aventura a simple vista inofensiva. Y es que cuando una parte del mundo se muestra hostil a tus acciones, la masa que gobierna el sentido del reloj logra casi imposible el encontrar refugio de semejante ataque digno de Atila. Asi es como hasta la mas indefensa de las criaturas solo encuentra refugio en su morada. Y yo que no soy el mas inocente ni el que tenga la morada mas asegurada sufre el dobleo el triple aquellos frentes belicos barvaros.
Dejenme pedir un ultimo deseo, un ultimo llanto por la partida de las esperanzas, ojala tengan un buen viaje, esperando que si y no regresen, pues la esperanza solo crea dolor pero mi alma no aguanta mas desolacion. Denme veneno que quiero vivir feliz, o alcohol para creer que lo soy, pero no me den miel porque se que la miel es lo dulce y yo soy lo suficientemente amargo como para darme cuenta de nuestras diferencias. Que la paz siga siendo un mito y un anhelo, que el dolor no se alivie, que si todo pasa y yo quedo, nadie me asegura que el nuevo mundo me va a aceptar a brazos abiertos, que si el sol sale y yo sigo siendo la sombra de mis pecados, a mi tortura se sumaria la soledad hostil, aquella que te ataca sin compasion.
Solo pidanme llorar, para crear un oceano nuevo, un mundo nuevo quizas, o quizas solo logre destruccion. Y mas dolor. Pero no divaguemos en estupideces que los antiguos ya sabian solucionar. Este prado esta muerto y de el no crecera nada en años, a menos que aceleremos el proceso aunque sea peligroso y poco limpio. No podemos quedarnos sentados pensando si esto tomara minutos o meses. El dolor duele el doble si es lento como un mar de vidrios rotos.
Quememos el mundo... que el fuego purifique...
...que el fuego te purifique...
