Vivir sin raices causa que no te sientas a salvo en ninguna aprte, que no pertenezcas a ningun lugar. Que nada te despierte el mas sentimiento de patria u hogar hace tener una constante nostalgia. Un constante dolor, una pena intratable.
Y si al arbol lo regamos con alcohol, en vez de agua, quizas por 30 segundos imagina tener raices. Quizas asi es feliz